La influencia de las Redes Sociales y el NeoLiberalismo Demócrata en la
victoria de Donald Trump
En este Análisis queremos echar un vistazo al aspecto que presenta el
Partido Demócrata con tanto Neoliberalismo: desastroso. ¿Es el
TPP cosa del pasado? ¿Exageraron los Medios el ‘factor locura’ de Trump?
También queremos comentar las opiniones de Tim Pool, célebre Periodista
Independiente que hace un uso innovador de la tecnología móvil y las redes
sociales, y opina sobre cómo las viejas categorías políticas se han
quedado patas arriba.
La victoria de Donald Trump sigue generando repercusiones. Por
este motivo analizaremos el devenir del Partido
Demócrata y los Medios de Comunicación
que dieron por sentada la victoria de Hillary
Clinton. "Los Medios
dominantes y del cinturón industrial no lograron proyectar ante los Estadounidenses
una imagen real sobre las posibilidades de victoria de Trump", sostuvo el Periodista y añadió que "además ahora
tratan de evitar el acceso a la información por parte del pueblo de Estados
Unidos".
En ese sentido el Analista Max Kaiser expresó que “en cualquier guerra propagandística, como la que tenemos al día de
hoy, causada por los Oligopolios más arraigados, la verdad es siempre la primera baja”. "Vivimos en un mundo post-verdad", sentenció.
Para nosotros los Medios
dominantes también intentan evitar cualquier ejercicio de autocrítica, de
reflexión sobre por qué Trump ha
ganado las elecciones (un ejemplo son los furiosos Artículos de Andrés Oppenheimer en CNN, Miami Herald y ABC COLOR de Paraguay); una excepción fue Danilo Arbilla, analista
de los mismos Medios, quien reconoció que Hillary
Clinton tuvo a su favor el apoyo de 239 Diarios, 151 Semanarios, además de
las poderosas Cadenas de Radio y T.V., mientras que a Trump sólo lo respaldaron 13 Diarios y la TV Fox, pero los escasos
Medios que lo apoyaron vendieron muchísimo, tal como el Periódico “Breitbart” que en el mes de Octubre
vendió más de 37 millones de ejemplares, superando al “New York Times”. Asimismo
lo comparamos con lo que pasaba antes de la Ilustración y de la invención de la imprenta, cuando la única fuente de verdad que tenía la gente era
la Élite, la única que sabía hablar Latín y decirle al resto lo que significaba
el texto. Esto es, dice la Analista
Stacey Herbert "lo mismo que quieren hacer ahora con los Banqueros de Wall
Street, los Gestores de Fondos de Cobertura de Connecticut, los Medios de Comunicación del cinturón industrial o los blogueros que
comparten mesa y mantel con Podesta"
el Jefe de Campaña de Hillary.
El Neoliberalismo Demócrata
Uno de los criterios que sostienen los más serios Analistas es que el Neoliberalismo, es “una política que ha impulsado sobre todo el Partido Demócrata, más incluso que el Partido Republicano”, que parece estar volviendo, con Trump, al “Conservadurismo Ideológico” de sus orígenes y al Nacionalismo
Republicano de la época de Abraham Lincoln. Por eso lo llaman ya “La Derecha Alternativa”.
Esto explicaría, en parte, porqué "la
representación Demócrata en el Senado" ha caído un 10,2% "desde el
2008". Y en el mismo período, "ha
perdido un 19,3% en la Cámara de Representantes" y "un 35,7% de sus Gobernadores".
Tomemos en cuenta que como pierda un Escaño más en el Poder Legislativo, se
quedará sin opción de vetar cualquier posible enmienda a la Constitución".
"Trump dará origen o a una
nueva Ilustración, o a una nueva “Reaganomics” sin sus defectos y
errores; esas dos posibilidades son las que tenemos en este momento",
concluyeron los Analistas.
La inversión de la política y la
"guerra de las redes"
En la entrevista al Periodista Tim Pool, especialista en Redes
Sociales, este dijo que en su
perspectiva, es llamativo que "Hillary
Clinton, que en teoría representa la Izquierda, era partidaria de entrar en
conflicto con Rusia, y la Izquierda la apoyaba, cuando a mí me habían
enseñado que la Izquierda solía más bien oponerse a la guerra". Por otra
parte, apareció "un Conservador como Sean Hannity" alabando a
WikiLeaks. "No sé cuándo se habrá invertido la política, pero el caso es
que se ha puesto patas arriba", opinó Pool.
Por otra parte se remarcó el papel del célebre Alex Jones en la campaña, como uno de los artífices del triunfo del
magnate por el rol que jugó en las Redes
Sociales. "Los partidarios de Trump
que hay en Internet lo definen como la guerra de las Redes", analizó el Periodista.
Al respecto explicó el concepto de "la
economía de los memes", es
decir "una comunicación clandestina que tiene que hacerse a través de
las Redes Sociales porque el resto de Medios no les hace caso".
Finalmente Tim Pool aseguró que
"uno de los factores que más ha contribuido a la victoria de Trump han sido los Independientes" a quienes "lo que verdaderamente les
preocupa es la Globalización, la Corporatocracia, etc." y
recordemos nosotros que en su Discurso de investidura como Candidato Republicano, Trump
dijo: “El Americanismo, no el Globalismo, será nuestro credo”. Allí
incluyó a muchos que "estaban a favor de Bernie Sanders", pero que al no haber sido este Candidato
elegido en la Convención Nacional Demócrata, por la trampa de que fue objeto
por parte del “Comité Nacional
Demócrata”, se inclinaron por Trump "por
tratarse de un Candidato
antiglobalización que encaja perfectamente con el discurso de los
manifestantes de la batalla de Seattle o de los antibelicistas".
Ganó Trump: ¿fracasó Wall Street y la Gran Prensa?
“La realidad es la única medida de la verdad”.
Cuando apareció un jinete con un caballo desbocado en la carrera por la
Casa Blanca, las Élites ocultaron su satisfacción y consideraron que la
selección de éste sería el menor daño posible para la aspiración de su
candidata, Hillary Clinton. Sin
embargo, al comenzar la competencia se dieron cuenta que un sector de la
población estadounidense comenzaba a considerar a este personaje no sólo un
entrometido sino que alguien que decía por primera vez en el escenario
electoral las cosas con franqueza o con aguda fuerza. Aún más, la
preocupación se hizo evidente cuando los sondeos alternativos, hechos en
profundidad, contrastaban con aquellos realizados por especialistas notables
ideológicamente comprometidos con la campaña Demócrata.
Entonces, la Corporatocracia en
conjunto se unió como un complejo financiero, militar, comunicacional,
industrial, con el fin de parar a cualquier advenedizo que intentara disputar
su Poder. Para ello, financió en un porcentaje de diez a uno su proyecto
ante el corsario Trump, comprometió
el apoyo de Barack Obama junto con
todo el Aparato Estatal y produjo una campaña mediática extraordinaria
basada en tres puntos: demeritar en
grado superlativo al contrincante, no trepidar en usar los mecanismos más
oscuros y generar una campaña del terror ante un eventual triunfo republicano.
Para ello, la información mundial se concentró en exponer Encuestas
donde todas daban por ganadora a Clinton,
contratar “Analistas” que confirmaran la necesidad de una persona con
experiencia (sin ahondar en el belicismo), dando una imagen de seguridad
planetaria a través de una mujer serena y consciente. En su defecto, demeritar
a Donald Trump como el hombre
opuesto al género femenino, abusador, ególatra, anti latino y contra
inmigrantes, sin conocimiento político ni burocrático, es decir, un simple
candidato. Y en el momento en que las tensiones se hicieron más fuertes,
apareció la rusofobia como tema central de la campaña. De ese modo, en el
planeta ya estaba supuestamente decidida la selección.
Sin embargo, no contaron con un análisis serio de la realidad Estadounidense: la
alta oposición al régimen de Barack Obama, el número inmenso de deportados
en su Gobierno, el aumento del desempleo y la pobreza estimada en cincuenta
millones de personas, la imagen negativa de Clinton considerada parte de la clase dominante y con serios nexos
con corrupción, su participación en Bengasi y la creación del Estado Islámico, el
papel no determinante de los Latinos y Afroamericanos, entre otros. La
palabra cambio y la oposición al Establishment
ahondaron las diferencias.
Por tanto, pese a la
frustración de la Gran Prensa, la supuesta victoria “sorpresiva” no lo es tanto
ya que se generó una condición nacional que permitió el triunfo.
Tres consideraciones básicas.
El resultado de la elección permite reflexionar sobre tres elementos para
el presente de dicha Nación y el planeta:
Uno, el discurso de Donald Trump ha planteado la necesidad
de unir a todo Estados Unidos, independientemente de sus divergencias y
diferencias de raza, religión u origen, con el fin de lograr el despegue
económico de dicha sociedad. Igualmente ha manejado una idea sustancial: dejar la política de hostilidad para
pasar a la concertación.
Dos, reconocer que el
proyecto de la Excepcionalidad (“somos
los mejores y podemos intervenir donde lo dispongamos”), tiene que ser abordado
por todas las Naciones soberanas para establecer claramente que ya no tiene
vigencia pues la multipolaridad es
el axioma actual.
Tres, recordar que la
Corporatocracia tiene una ductibilidad extraordinaria y puede cooptar al Candidato
díscolo para que continúe el proyecto militar-industrial de confrontación y, si
es preciso, la amenaza nuclear como mecanismo de presión.
Una de las conclusiones más importantes es
que CNN, en tanto órgano de
coordinación de la información mundial de la Corporatocracia, no posee la credibilidad que se atribuía pues todo
lo expuesto durante meses resultó ser un producto ideológicamente construido en
representación de Hillary Clinton...que
finalizó con un enmascaramiento de la verdad objetiva.
Finalmente, pese a las dudas de que esta
elección cambie en algo la disposición agresiva de Washington, es factible y
razonable trabajar decididamente para que los conflictos actuales que aquejan a
América Latina, el Medio Oriente, Europa. Asia, sean tratados en un espíritu de
razonabilidad. La escogencia de Donald Trump es una incógnita y no hay que
descansar para despejarla en pro de la Humanidad como la meta más trascendental
de la paz en justicia universal.--
FUENTES: Además
de los citados, el Analista internacional Carlos Santa María; RT Noticias; El
País; The Guardian; Kaiser Report; Ria Novosti; Breitbart; Cadena TV Fox; The
Washington Post.-
